Crece el área sembrada con girasol en San Luis y se afianza como una alternativa rentable

La campaña 2025 mantiene un ritmo sostenido en la provincia, con un avance del 33% sobre las 81.000 hectáreas proyectadas, 3.800 más que el año anterior. El girasol se posiciona como el tercer cultivo estival de mayor importancia entre los estivales, impulsado por la mejora genética y la siembra directa.

El ingeniero agrónomo Juan Pablo Odetti destacó que «el girasol ha ganado terreno, superando incluso a especies tradicionales como el sorgo y el algodón.» Según datos históricos desde 1970, el cultivo vivió un fuerte auge en el año 2000, cuando se alcanzó el récord nacional de más de 4 millones de hectáreas sembradas. Sin embargo, la llegada de los cultivos genéticamente modificados y su expansión en Argentina desplazaron al girasol. En los últimos años, la provincia de San Luis ha observado una recuperación sostenida gracias a condiciones locales favorables.

Durante una reciente jornada técnica del INTA San Luis, Odetti explicó que los rendimientos promedio han aumentado desde 1970, pasando de 26 kilogramos por hectárea por campaña. Esta mejora se debe a la adopción de prácticas agronómicas adecuadas y el uso de híbridos mejorados.

La provincia alcanzó casi 90.000 hectáreas en el ciclo anterior, lo que representa un incremento del 10% respecto a años previos. Los rendimientos provinciales promedian entre 1.700 y 1.800 kilogramos por hectárea, con algunas áreas superando esa cifra.

Uno de los factores clave para el éxito del cultivo es la rápida adopción tecnológica, como la siembra directa y la utilización de híbridos tolerantes a herbicidas y enfermedades. Esto ha mejorado tanto la estabilidad productiva como la calidad del aceite obtenido.

El fortalecimiento del girasol también se debe a una articulación entre productores, empresas y organismos públicos. La ingeniera agrónoma Belén Bravo explicó que desde la campaña pasada desarrollan ensayos comparativos de rendimiento con vistas a incorporarse a la red INTA-ASAGIR.

La historia reciente del girasol en San Luis demuestra adaptación, tecnología y resiliencia. Con bases sólidas en investigación e innovación, el cultivo se ha consolidado como una alternativa rentable frente a la volatilidad climática y de mercados. Todo indica que, en los campos de San Luis, el girasol seguirá floreciendo con fuerza.

Por qué es una alternativa rentable

El girasol se presenta este año como una opción rentable y segura para los productores locales debido a su mayor tolerancia a la sequía y las altas temperaturas, además de un mercado mundial firme del aceite. La oleaginosa tiene bajos costos relativos de producción, menor inversión inicial en insumos, menores gastos de fertilización y un ciclo más corto que otros cultivos estivales.

Los promedios provinciales están entre 1.700 y 1.800 kilogramos por hectárea, superando esa cifra en algunas áreas. Comparado con la soja o el maíz, el girasol mejora la estructura del suelo y deja residuos de alta calidad para el siguiente cultivo.

En síntesis, el girasol se ha convertido en una alternativa rentable debido a su resiliencia agronómica, costos contenidos y precios firmes, lo que lo convierte en un cultivo ideal para la estabilidad productiva en San Luis.